Suyos eran los caminos,castillos y senderos y por donde ella pisaba la hierba crecía con fuerza y hasta las nubes enfurecían al no poder controlarla. Contaban de ella que nació sin ningún sentido pero jamás[…]
Suyos eran los caminos,castillos y senderos y por donde ella pisaba la hierba crecía con fuerza y hasta las nubes enfurecían al no poder controlarla. Contaban de ella que nació sin ningún sentido pero jamás[…]